De la abundancia del corazón / Ayuda para sanar 12

Ayuda para sanar 12: Tenga fe en Dios, Amigo.

Respondiendo Jesús, les dijo: “tened Fe en Dios. Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será echo lo que dice, lo que diga le será echo. Por tanto os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.” Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas. (

Mark 11:22-25 NTRV)

“La fe comienza donde se conoce la voluntad de Dios.”

Kenneth Hagin

Cuando empezamos estas series de sanidad, les dije que el Señor me hablo mientras oraba por el fallecimiento prematuro de varios Cristianos maravillosos. Sentí que deberíamos hacer algo más para ayudar a que esto no siga pasando. Él me dijo: “hay un vacío en el creer en sanidad.” Me mostro tres áreas, donde a menudo falta este ministerio de sanidad. La primera es en entender y apropiarnos de nuestra identidad en Cristo. Lo hemos visto ya por algunas semanas (ayuda para sanar 3-11) eres amado con un amor incondicional, eres declarado justo, y eres Santo. Es quien tú eres.

Ahora dirigimos nuestra atención a otra área donde tenemos algunos puntos ciegos: el tema de la Fe. Seamos sinceros: soy un hombre de Fe, Dios ha tenido gracia sobre mí para sanarme, cuidarme, y permitir servirle por Fe. Como muchos de nosotros en estos tiempos, tengo una lista de cosas en las que creo debo ser instruido con el fin de recibir de Dios. Particularmente en el área de sanidad. Aunque hay muchos matices y senderos, el típico sermón es algo así:

  1. Fe viene por el oír: todos debemos de escudriñar las escrituras acerca de la sanidad y escuchar servicios que hablen de Fe y de sanidad. Romanos 10:17
  2. Cuando oras, cree que recibes tu sanidad en ese mismo momento. Orar por la misma cosa otra vez seria incredulidad. Marcos 11:24
  3. Recibes lo que declaras: empieza a declarar que eres sano. marcos 11:24
  4. Sé un hacedor de la palabra: toma acción que indique que has sido sanado. Esto incluye el agradecer a Dios por haberte sanado. Santiago 2:26

En todo momento creo, declaro, y practico todas estas cosas. Aun, miro personas amadas que luchan con cada una de ellas. Es con temor y temblor que analizo algunas de las cosas que nos impiden experimentar lo mejor de Dios. Algunos de Ustedes probablemente se molestaran, y está bien, solo sigue leyendo. En las próximas lecciones, veremos cada uno de los cuatro “pasos” del proceso e identificaremos algunas de las dificultades. Por su bondad Dios nos muestra algunos remedios: maneras de ayudar a las personas que no caigan en ese vacío o, si ya están en él, mostrarles la salida.

La mayoría de nuestros problemas radica en esa parte de nosotros mismos a la que realmente le gustan los rituales religiosos: queremos una serie de acciones prescritas que produzcan un resultado predecible. Eso se llama obras, legalismo o como quieras llamarlo. Es como aplicar una fórmula que depende de mí desempeño para que Dios se mueva. Dios no actúa así, antes de profundizar en los detalles de cada uno de los 4 “pasos”, quiero señalar tres verdades generales:

  1. Fe no es por obras. “obras” significa que estoy haciendo o diciendo cosas para que Dios me Bendiga; eso son obras. Decir que has sanado, alabar y dar gracias a Dios por tu sanidad, orar en el Espíritu, etc. Todo eso es maravilloso, si lo crees. Mi experiencia con muchas personas ha sido que estas creen que deben llenar un requisito para que Dios las sane. Casi puedes escuchar el signo de interrogación al final cuando pronuncian la palabra “Fe.”
  2. Fe no es hipócrita. En nuestra cultura de “Fe”, somos muy rápidos para decirles a las personas que NO está bien declarar que nos sentimos enfermos, o temerosos, o que los síntomas de nuestros cuerpos nos angustian. Les damos un sermón y les decimos, que tenemos la palabra, sabemos lo que se espera, así que “debemos declarar un buen reporte.” Pretendiendo que todo ESTA BIEN, cuando no es así, eso no es Fe.es una definición de hipocresía: pretender que eres algo que en realidad no crees. (también , tenga en cuenta: que sermoneando a las personas diciéndoles la verdad, no ayuda cuando están creciendo en la Fe)
  3. Estar enfermo no es pecado. No hay ninguna razón para auto condenarse cuando parece que no “avanzas” en tu sanidad. El enemigo es muy rápido para decirte que hay algo que estás haciendo mal, alguna falla de tu parte. Tal vez te está susurrando que el predicador que estas escuchando también está equivocado, tal vez estas ocultando algún pecado que ni siquiera tú lo sabes. Bueno, lo más seguro es que algo anda mal en ti, somos humanos, todos los predicadores también se equivocan algunas veces, son humanos! Cuando Dios quiera ayudarte a lidiar con un pecado que tu no estés enterado, te lo hará saber, no te pondrá enfermedad por eso! Nada de estas cosas tienen algo que ver con tu sanidad. Tampoco te hacen menos creyente.

Aquí está el punto: Dios te quiere sanar, por gracia el ya proveyó esta bendición por medio de la Fe. No es por obras que lo recibes. Lo que los demás piensan es irrelevante para Dios. Incluso tus propias debilidades no influyen en tu sanidad. Respira profundo, perdónate a ti mismo y perdona a todos los que te ensenaron mal, la sanidad te pertenece. Dios lo hizo por Fe para que fuera por gracia. ¡Él quiere hacerlo fácil, no difícil, así que tómalo con calma!

Siguiente paso: vuelve a repasar las tres declaraciones de arriba y has un pequeño inventario personal. Necesitas estar seguro de si andas en Fe, o por emociones. Primero, ¿Qué cosas estás haciendo o diciendo en nombre de la “Fe” que sabes por dentro que son realmente intentos de que Dios te sane? Segundo, ¿Qué te has sorprendido haciendo o diciendo acerca de porque le preocupa o que los demás piensen? ¿En tu vida, con quien evitas ser honesto por miedo al sermón que te va a dar? Finalmente, ¿en qué área tu Fe flaquea? ¿Cómo te sientes contigo mismo acerca de eso? ¿Acerca de Dios? ¿De otros Cristianos? Se exageradamente honesto contigo mismo. Escribe tus respuestas y llévalo al Señor en tu tiempo de oración. Háblalo con tu Padre, pídele sabiduría y dirección para empezar a hacer ajustes. Él te quiere sanar. Si todavía no tienes a alguien con quien puedas ser honesto acerca de estas cosas, pídele al Padre que te mande a un amigo sabio para que le cuentes tus cosas. No deberías estar pasando por esto tu solo.

Así que las promesas de Dios se reciben por medio de la Fe, es un regalo inmerecido. Y, vivamos o no de acuerdo con la ley de Moisés, todos estamos seguros de recibir estas promesas si tenemos una Fe como la de Abraham, quien es el Padre de todos los que creen. (Romanos 4:16 NTV)

Pastor Virgil Stokes

Dios quiere que seas sanado, y yo también

Visita nuestra página de Facebook del Instituto de Entrenamiento Ministerio de Fe.

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s