Construyendo personas de sustancia para obras de poder
Hace unos 40 años atrás, me encontraba al borde de mi cama leyendo la Biblia, cuando me encuentro en Gálatas 6, y leo estas palabras, “todo lo que el hombre sembrare esto también cosechara”, dos cosas pasaron por mi mente, la primera, “quien escribió este libro es quien hizo las reglas”, después casi simultáneamente fui llenándome de asombro, sabía que ese pensamiento no venía de mí, Dios me estaba hablando, y que el libro que estaba leyendo era su libro. De ese momento a la fecha, nunca he dudado de que la Biblia sea la palabra de Dios. La lógica es muy simple: cualquier ignorante sabe, “que lo que se siembra se cosecha.” Son las reglas de la tierra y del universo. No tiene sentido común que no haga sentido, pero es la verdad y, lo creo. Solo el que hace las reglas sabe las reglas.
En nuestra búsqueda para ser guiados por Dios, para escuchar su voz, a veces nos preguntamos qué es lo más milagroso y supernatural que ha sucedido desde la resurrección: la Biblia. Puedo oír voces audibles, dar servicios “proféticos”, y leer grandes libros de literatura espiritual, pero la forma número uno como Dios me habla es a través de su palabra escrita. Mi diariamente mi prioridad es pasar tiempo con Dios leyendo y meditando en su palabra, esperando encontrar dirección, paz, y corrección, todos los días. El nunca decepciona.
A medida que pases tiempo con El, trata esto:
1. Ssshhh! Encuentre un lugar tranquilo, apague la televisión y el celular por 30 minutos. Habacuc 2:20
2. Sorpréndase: tome un momento para meditar que el libro que estará leyendo es una comunicación inspirada por el creador del universo 2 Timoteo 3:16-17
3. Ore: pídale a Dios que le muestre su palabra, es un tesoro enterrado. Proverbios 2:1-7
4. Lea despacio: no es una carrera, piense en lo que quiere decir y quien lo dice, detente cuando algo te parezca interesante o tengas alguna pregunta. Proverbios 4:20-22/ Hechos 17:11
5. Pregunta: pregúntale a Dios que significa ese verso para ti. “¿Qué dices, Señor?” ¿Cómo aplico esto a mi vida? Colosenses 1:9-12
6. Medita: mantente en silencio, esfuérzate por mantener la escritura que leíste en tu mente. ( esto requiere de practica) salmos 119:15/ salmos 1:1-3/ Josué 1:8
Alguien dijo: “esta es mi Biblia. Yo soy lo que dice que soy, tengo lo que dice que tengo. Puedo hacer lo que dice que puedo hacer. John Osteen
Escrituras Bíblicas: el Espíritu de Dios da vida; la carne no cuenta para nada. Las palabras que te he hablado—están llenas de vida y del espíritu Santo. (Juan 6:63 NVI)
Este es el punto: vivimos en tiempos difíciles. Muchas Iglesias intentan atraer al mundo que les rodea reformando la Iglesia al mundo. A veces eso significa desvalorizar la palabra de Dios. No dejes que las tendencias del hombre te dejen sin aliento de Dios, es maravilloso y vivificante el pan diario que El provee. Recupera tu reverencia por la palabra. Abre la palabra con expectativa y allí te estará esperando.
Pastor Virgil Stokes